⌚ Solo necesitas 4 minutos para leer este artículo
Soltando heridas: Salir de una relación tóxica
Una relación tóxica se puede dar en cualquier ámbito de nuestra vida, ya sea una relación de pareja, familiar, amistad, compañeros de trabajo… Voy hablar en general de las relaciones tóxicas.
Ese tipo de relaciones nos hace daño, nos manipula y destruye todo aquello que somos, no nos permite pensar con claridad ni actuar de acuerdo a nuestra forma de ser… en definitiva, este tipo de relaciones nos hace personas infelices.
Las relaciones tóxicas nos atrapan en una red negativa, lo mismo que ocurre con un insecto en una tela de araña. Nos es muy difícil salir de ellas ya que nos sentimos atrapados o enganchados, a pesar de hacernos daño.
Es una unión muy fuerte, intensa y a la vez muy destructiva. Nos perdemos dentro de ella y nos convertimos en alguien que no somos. Seguimos perdidos dentro de esta relación aunque ello nos implica sufrir el mayor de los daños: la pérdida de nuestro amor propio.
¿Cómo saber si tenemos una relación tóxica?
En estas relaciones las personas se engañan a sí mismas pensando que la otra persona ”no es mala” e intentan ver las partes positivas, como por ejemplo: es una persona protectora, le quiere y le cuida, siempre está ahí cuando le necesita. Sin embargo, la realidad es que la relación solo se basa en la incertidumbre, la necesidad y la inseguridad.
Si no sientes deseo de estar con esa persona porque te hace sentir mal, porque te alteras fácilmente, porque tu vibración cambia, te sientes manipulado y utiliza los sentimientos de culpa contra ti, siendo la otra persona siempre la víctima, utiliza la ironía o el sarcasmo para contradecirte: Estás en una relación tóxica.
La relación tóxica siempre hay una persona dominante y otra sumisa. Se trata de una relación donde una o ambas partes sufren, por el hecho de estar juntas. Ambas se ven sometidas a un desgaste emocional con el objetivo de convencerse a ellas mismas que pueden salvar esa relación. Si bien ambas partes pueden sufrir, el que se lleva la peor parte es el que acata las órdenes.
Llegamos a convencernos a nosotros mismos que si no mostramos malestar sobre ciertos aspectos, evitaremos un nuevo enfrentamiento, llevándonos al autoengaño y esto a su vez llevándonos a enfermar física y emocionalmente, ya que esto nos causa estrés y ansiedad.
En este tipo de relaciones existen muchos problemas de comunicación a los que se suman las mentiras, los chantajes emocionales y, sobre todo, la manipulación. Este este conjunto de malestares acaban pasándonos factura.
Señales para identificar una relación tóxica
Te pide que cambies tu forma de ser
- Dejas de ser tú para complacer a la otra persona
- Cambias tu forma de ser cuando estás con esa persona para agradarla
- No te sientes feliz cuando estás con esa persona
- Te chantajea emocionalmente para conseguir sus objetivos
- Siente celos de otras personas con las que te relacionas
- Desconfía de ti
- Te controla
- Le molesta que no cuentes con él/ella para hacer planes
- No respeta tu intimidad o privacidad
- Te hace de menos, haciéndote sentir que lo tuyo es menos importante
- Te cuestiona continuamente
- Te falta el respeto
- Te trata con excesiva sobreprotección
- Te hace responsable de sus problemas
- Te planifica la vida sin pedirte opinión
- Justificas su comportamiento
Salir de una relación tóxica
En una gran mayoría de ocasiones, no somos conscientes de que mantenemos una relación tóxica, ya sea con un familiar, pareja, amistad… Lo primero que debemos hacer es tomar consciencia de nuestras emociones cuando estamos cerca y cuando estamos lejos de esa persona.
Si tienes dudas sobre esa relación, realízate las siguientes preguntas:
- ¿Qué sentimientos te produce esa persona?
- ¿Cómo te sientes cuando estás con esa persona?
- ¿Cómo actúas cuando estás con esa persona?
- ¿Cómo reaccionas con esa persona? ¿Cómo reacciona ella contigo?
- ¿Puedes actuar como realmente eres?
- ¿Qué bienestar te aporta esa relación?
- ¿Por qué sigues manteniendo una relación con esa persona?
Cuando te respondes honestamente a estas cuestiones, si estás ante una relación tóxica, tus verdaderos sentimientos te van a advertir, pero para ello debes ser sincer@ contigo mism@.
Las relaciones tóxicas se pueden superar, no es fácil, has estado sometido a una manipulación constante durante un tiempo. Aquí te dejo unas claves para que, si estás manteniendo algún tipo de relación tóxica, puedas alejarte de ella.
-
Reconocer que es una relación tóxica
El primer paso para poder salir de esta relación y avanzar en tu camino, es reconocer que estás manteniendo una relación tóxica con esa persona. Puedes darte cuenta de ello cada vez que sientas que no te apetece estar cerca de esa persona.
-
Identificar las actitudes que te han llevado a esa relación.
Debes identificar tus actitudes y miedos que te han llevado a dejar tu forma de ser a un lado para complacer a otra persona. Esto te permitirá poder trabajar en ti para que no se repita la misma situación.

Conecta con tu interior
Es el momento de conectar contigo mism@. Trabajar en ti para ser consciente de tus emociones, de aquellas que te están dañando para después poder liberarte de ellas. Debes escuchar tu voz interior para poder ver con claridad que es lo que realmente quieres.
No te culpes
No eres culpable de que se termine esa relación. Has sido víctima de una manipulación constante durante un tiempo. Es el momento de empoderarte y volver a ser tú.
Tómate tu tiempo
Al principio sentirás una avalancha de emociones contrariadas por la situación. Debes darte tiempo para gestionar todas estas emociones. El tiempo te va a ayudar a ver las cosas desde otras perspectivas.
El perdón nos ayuda a soltar las heridas. Lo más importante es que te perdones a ti mism@. Envía bendiciones a esa persona y agradece por el aprendizaje. Esto, que sé que parece difícil, te va ayudar a liberarte de todo ese dolor que te ha causado y te va ayudar a recuperar tu paz interior.
-
Suéltalo y sigue con tu camino
No te digo que olvides la situación, pues esta situación te ha aportado un aprendizaje que probablemente te ayude en situaciones futuras. Quédate con ese aprendizaje, suelta todo lo demás y sigue con tu camino.
Haz aquellas cosas que te encanta hacer y que llevabas tiempo no permitiéndolo. Rodeat de personas positivas, sal a dar un paseo, date un capricho, escucha música…
La meditación te va ayudar a conectar contigo mismo, a ser consciente de tu verdadero dolor y te va ayudar a ir soltando todo ese dolor y los sentimientos que te hacen daño.
Imagina como será tu vida dentro de un tiempo, cuando hayas superado el duelo por la ruptura de la relación, te dará fuerza para seguir adelante y te reafirmará en que tu decisión era la correcta. No importa si ves ese futuro con otra persona o sola, lo importante es que recuperarás toda esa felicidad que has perdido en este tiempo.
«No permitas que nadie apague tu luz interior. Tu felicidad está dentro de ti»
Almudena Dueñas

También te puede interesar: